Por el día mundial de las ONG nos gustaría mostraros esta entrevista que le realizamos a Helena Álvarez, científica marina de Oceana.
Problemas en los océanos a los que se enfrentan las ONG
Son muchos los problemas que atañen hoy en día a los océanos, pero el mayor de ellos es quizá el desconocimiento. Se ha dicho en muchas ocasiones que nos es más familiar el planeta Marte que las profundidades del mar, a pesar de que este suponga dos terceras partes del planeta en el que vivimos, bien denominado planeta azul.
Desde la contaminación en todas sus variantes (vertidos incontrolados, plásticos, ruidos, etc.) hasta la sobreexplotación de los recursos pesqueros, pasando por los desconocidos efectos del cambio climático y la escasa o inadecuada gestión de las zonas protegidas, la capacidad auto reparadora –antes erróneamente concebida como ilimitada– de los mares está llegando a su término, hecho recogido en innumerables publicaciones científicas.
Cómo actúan las ONG
El primer paso para ponerle remedio consiste en conocer qué es lo que habita en las profundidades antes de que desaparezca, así como de qué forma está siendo afectado por estas presiones antrópicas. Por ello, Oceana lleva más de diez años documentando los ecosistemas marinos y realizando campañas de investigación oceanográfica en las cuales se descubren y documentan estos ecosistemas que, en ocasiones, se encuentran en zonas donde apenas existe información o nunca se han investigado con anterioridad.
Para llevar a cabo esta misión, Oceana emplea una técnica no intrusiva que consiste en el manejo de un robot submarino operado remotamente (R.O.V por sus siglas en inglés), el cual es capaz de recoger imágenes de hasta 1.000 metros de profundidad y conducirlas a través de un cable umbilical de fibra óptica unido al barco. A bordo, estas imágenes son recibidas en una pantalla, donde un equipo de científicos las observa con atención y posteriormente las analizarán en tierra. Así mismo, la documentación de las aguas más someras corre a cargo de un videógrafo y un fotógrafo submarino especializados.
Las especies más interesantes para las ONG
Las especies que resultan más interesantes son aquellas formadoras de lo que se conoce como “hábitats vulnerables”. Éstas suelen caracterizarse por crecer sobre el sustrato marino, tener una gran longevidad (algunas pueden vivir hasta 4.000 años) y crear estructuras que favorecen la asociación con otras especies generando, por tanto, lo que se denomina un hot spot (o punto caliente) de biodiversidad. Estas especies son especialmente sensibles a las perturbaciones externas.
Algunos ejemplos son los arrecifes de coral y agregaciones de esponjas de profundidad. Los arrecifes de coral blanco están formados principalmente por las especies Madrepora oculata y Lophelia pertusa, los cuales representan un hábitat perfecto para el cobijo, cría y protección de muchas otras especies, albergando índices de biodiversidad que nada tienen que envidiar a los de los corales tropicales.
[piopialo vcboxed=»1″]Por el día mundial ? de las #ONG, descubre más sobre el paraíso llamando Oceanía ?. #DíaMundialdelasONG #WorldNGODay De esta forma, Oceana consigue amplificar la voz de las profundidades del océano, colocando imágenes, datos y muestras donde antes sólo existía un gran vacío de información. Como una imagen vale más que mil palabras proporcionamos esta información a las autoridades correspondientes, consiguiendo así en numerosos casos la protección de la zona investigada. Esto evita la degradación y desaparición inminente de los ecosistemas que, aunque vivan en las profundidades más oscuras, son imprescindibles para la vida en el planeta. [vc_single_image image=»27583″ img_size=»full» onclick=»custom_link» link=»https://noblue.es/landing-newsletter»]